Add parallel Print Page Options

15 Pero Ana le respondió:

—No, señor mío; soy una mujer atribulada de espíritu. No he bebido vino ni sidra, sino que he derramado mi alma delante de Jehová. 16 No tengas a tu sierva por una mujer impía, porque sólo por la magnitud de mis congojas y de mi aflicción he estado hablando hasta ahora.

17 —Ve en paz, y el Dios de Israel te otorgue la petición que le has hecho —le dijo Elí.

Read full chapter